miércoles, 20 de mayo de 2015

Retiro Espiritual




Seminario, realizado por Monseñor Antonio Baseotto, en la casa del Obispado Castrense, el 16 de Mayo del 2015

 El sábado 16 de mayo, Monseñor Baseotto, nos condujo sobre el tema de Pentecostés,  es una festividad de carácter religioso que se celebra cincuenta días después de la Pascua, poniendo término al periodo pascual, para los cristianos es la conmemoración del descenso del Espíritu Santo sobre los Apóstoles de Jesucristo, que marca el nacimiento de la Iglesia.
Etimológicamente, la palabra proviene del latín Pentecoste, y esta a su vez del griego πεντηκοστή, (pentecosté), que significa ‘quincuagésimo’, haciendo alusión, precisamente, a los cincuenta días que transcurren desde la Pascua hasta el Pentecostés.
En la religión cristiana
En el Nuevo Testamento relata el descenso del Espíritu Santo durante una reunión de los Apóstoles en Jerusalén (Hechos de los Apóstoles, II), acontecimiento que marcaría el nacimiento de la Iglesia cristiana y la propagación de la fe de Cristo .Por ello, la Iglesia dedica la semana del Pentecostés en honor al Espíritu Santo, pero también celebra la Consagración de la Iglesia. Para la liturgia católica, el Pentecostés es la cuarta fiesta principal del año y, según el calendario, puede celebrarse entre el 10 de mayo y el 13 de junio .En el Nuevo Testamento, ese Espíritu Santo aparece moviendo a Jesús durante toda su vida. Fue Él quien cubrió el seno materno de María antes de que Jesús naciera . Más tarde, descendió de forma visible en el momento del bautismo de Jesús, y posteriormente lo condujo al desierto para devolverlo luego a Galilea
El Espíritu Santo en la Iglesia
En la Iglesia, Pentecostés es la Confirmación de la promesa de Jesús: Dentro de pocos días seréis bautizados en el Espíritu Santo. Esto pone de manifiesto varios aspectos, entre los que se destacan: La unidad espiritual de todos los que recibieron. El Espíritu de Jesús. Un solo Cuerpo y un solo Espíritu.  Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos, por todos y en todos.